Una de las celebraciones más importantes para el culto cristiano es aquella que se hace a Todos los Santos, este tiene lugar cada 1 de noviembre. Si bien dentro de la cultura mexicana conocemos una forma de celebrar desde pequeños, en otros países de Latinoamérica la celebración suele ser diferente en algunos aspectos y conectar con la nuestra en otro más. En este testimonio abordaremos cómo se vive la celebración en dos poblaciones de Guatemala; Santiago y Sumpango, embajadores en el departamento de Sacatepéquez. Además de describir cómo esta celebración constituye parte de un patrimonio inmaterial efímero para esta región.

En ambos pueblos se realiza una festividad popular en la que participan todos sus pobladores en la creación de Barriletes (enormes discos de colores, construidos en papel de China, con una gran variedad de colores y con estructuras ligeras de carrizo). Se busca el objetivo de establecer una comunicación con las ánimas y sus familiares. Esta actividad se lleva a cabo en el contexto del propio Campo Santo, en el que son elevados estos gigantescos barriletes, cubriendo el cielo de colores logrando así un contraste con el azul del cielo y la luz del sol.

Se trata de dos tradiciones una en un contexto de su cementerio y comunicación de los deudos con las ánimas de los difuntos y otro no en el mismo contexto, pero ambos mantienen una gran participación y celebraciones en su poblado.

BARRILETES GIGANTES – Municipalidad de Santiago Sacatepéquez. (n.d.). https://munisantiago.gob.gt/index.php/barriletesgigantes/

https://plus.google.com/+UNESCO. (2020, April 3). El Día de Muertos: el regreso de lo querido. UNESCO. https://es.unesco.org/news/dia-muertos-regreso-lo-querido-0

Visita de campo a los sitios del poblado de Santiago y Sumpango, departamento de Sacatepéquez en el altiplano de Guatemala, en compañía del Dr. Óscar Antonio Quintana Samayoa, investigador guatemalteco que tiene una casa de campo en un lugar cercano llamado San Lucas y que durante nuestra visita en compañía de mi hija Marie Regina Siller Boucher en el mes de noviembre de 2019, visitamos estos dos lugares el día 2 de noviembre, un día después de la fiesta tradicional de la fiesta de muertos que se festeja el día 1 de noviembre.

Pudimos ver a muchos de los familiares que seguían acudiendo al cementerio o Campo Santo como prefiero llamarlo. Muchos llevaban aún flores y otros seguían elevando enormes “barriletes” de colores en el lugar con la ayuda de muchos de los presentes en medio de las tumbas adornadas con multitud de flores conformando un paisaje florido como un edén efímero para los muertos en su recuerdo anual.

Por la tarde visitamos la población contigua de Sumpango, en donde existe una enorme explanada en la parte de la cima del cerro principal del poblado, en donde se realizan los izamientos de enormes barriletes de colores. Esta tradición y competencia que se realiza se inició en el año de 1995 y de forma anual es parte de un evento competitivo y turístico en el lugar.

Muy diferente al primero de Santiago en el que se guarda una tradición original mucho más antigua y asociado a un contexto funerario que da significación al uso y comunicación de este medio entre ellos y las ánimas del lugar a través de estos discos solares suspendidos en el cielo.